Ya estará bien de juzgarme siempre yo a mi misma, ¿no? He
decidido que paso de atormentarme siempre, de mirarme al espejo y darme asco.
Es que no tiene sentido la verdad, esta vida de mierda es demasiado corta como
para ir siempre de pesimista, juzgándome a mi misma. No, lo mejor es quererse
uno mismo, aceptarse así. Por no gustarme no voy a ser mejor ni peor, es decir,
no gano nada. Sinceramente, la gente que juzga a otras o a ellos mismos por su físico,
me parece una pérdida de tiempo, porque con eso no se va a ganar nada. A partir
de hoy cuando me mire al espejo: me sonreiré porque no hay nadie como yo, y
aunque no sea perfecta, siempre habrá alguien que me quiera así.
No hay comentarios:
Publicar un comentario